martes, 20 de mayo de 2014

CAMPO DE AMAPOLAS


Era un día soleado de primavera y estaba en el campo realizando las tareas de siega del trigo. Todo a mi alrededor estaba verde y con pequeñas amapolas de color rojo que daban pequeños toques de color y alegría al paisaje.
La suave brisa que corría hacía bailar el trigo y las amapolas al mismo compás y el trinar de los pájaros los acompañaba aportando su música.
Estaba pasmado contemplando lo que sucedía a mí alrededor, hasta que unas carcajadas me hicieron volver a la realidad. Eran unas madres que, acompañadas de sus hijos, salían a disfrutar del buen tiempo y del paisaje.
Durante su paseo aprovechaban para coger alguna que otra amapola y los niños aprovechaban para corretear detrás de las mariposas que revoloteaban por el campo.
Me quedé con esta imagen grabada en mi mente, parecía el cuadro perfecto para cualquier pintor.
Juan Enrique, 4º C

2 comentarios:

  1. Es una historia que no me hace pensar, ya que no existe acción.
    Esta historia representa muy bien un día común en el campo.

    Alexis

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  2. La historia me ha gustado, ya que es sencilla, comprensible y fácilmente podría ser una historia real que le sucede a cualquiera

    Enrique Sabucedo 4ºB

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